Hoy lloré. Rompí mi promesa hacia mi misma en no recordar, en no pensar en él, y volví a caer como una estúpida. Odio tener que derramar lágrimas por esa persona que en algún momento amé y me di cuenta que es una basura. No lloré por que lo extraño si no que lloré de impotencia, saber que perdí mi tiempo con él, que aunque me haya hecho sufrir lo amé, y lo sigo queriendo. Pero lo bueno es que no lo extraño, ya no tengo la necesidad de verlo como antes, seguramente es porque pasó mucho tiempo de que no tengo comunicación con él, él es señor "X". Señor X fuiste la decepción más grande que sentí en toda mi vida. Me fallaste, me ilusionaste con tus palabras, me mentiste y lo peor de todo fue que me engañaste. Y sin embargo yo acá, te sigo queriendo y sin guardarte rencor por lo que me hiciste. Fuiste lo mejor, y más que nada lo peor que le pudo pasar a mi vida. Pero acá estoy, viva y seguí adelante, pero por tu culpa, ya no confío en nadie, por tu culpa ya no creo más en el amor, por tu culpa soy más fría que de costumbre, y por tu culpa hoy lloré por todo eso.
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